La experiencia en el gimnasio puede variar significativamente según las preferencias personales, la calidad del equipo y el ambiente general. Muchas reseñas destacan al personal amigable y servicial, creando una atmósfera acogedora, pero también hay críticas recurrentes sobre la antigüedad y el estado de los equipos, que parecen desactualizados y necesitan mantenimiento. A pesar de contar con una amplia gama de máquinas, los usuarios expresan decepción por la disponibilidad y el estado de las mismas, a menudo describiéndolas como viejas o insuficientes para el número de visitantes. La limpieza del gimnasio se elogia en general, aunque algunas reseñas mencionan problemas con las duchas y los vestuarios, indicando que no cumplen con los estándares esperados de limpieza. Si bien la mayoría de los usuarios parece satisfecha con su experiencia de entrenamiento, hay preocupaciones sobre la masificación, especialmente durante las horas pico, lo que disminuye el disfrute de las sesiones de entrenamiento. En cuanto a la ambientación, es mixta, ya que algunos elogian la energía vibrante del gimnasio mientras que otros sienten que los niveles de ruido son demasiado altos, especialmente con la música a todo volumen durante los entrenamientos. La falta de aire acondicionado también parece generar incomodidad durante los días calurosos, lo que empeora la experiencia para algunos miembros. En resumen, aunque hay muchos aspectos positivos respecto al personal y la limpieza, se necesitan mejoras significativas en cuanto a la equipación y el confort para lograr una mejor experiencia en general.